La belleza de las plantas con floraciones constantes puede transformar cualquier espacio en un jardín de color y vida. En este artículo te hablamos de 10 plantas que florecen todo el año para interiores y exteriores.
Anturio
Características
¡El anturio, o Anthurium para los amigos, es una planta que roba corazones! Con sus flores exóticas y brillantes hojas, es difícil resistirse a su encanto. Se ha vuelto súper popular gracias a sus curiosas flores en forma de corazón, que son perfectas para añadir un toque romántico a cualquier rincón. Aunque no está de fiesta todo el año (no florece los 365 días), su periodo de reposo es tan breve que no tendrás que esperar mucho para volver a disfrutar de su belleza.
Cuidados
- Luz: Prefiere el sol tenue de la mañana o tarde. El sol filtrado todo el día es ideal
- Riego: Solo cuando la tierra esté completamente seca.
- Sustrato: Utiliza tierra para cactus con buena aireación, similar a la de las orquídeas.
Mantenimiento
Limpia las hojas con paños húmedos y retira flores y hojas dañadas para incentivar la floración.
Violeta Africana
Características
La violeta africana es la diva de las plantas de interior, con unas flores monísimas en tonos violetas, rosas, azules y blancos. Estas bellezas añaden un toque de color increíble a cualquier jardín o balcón. Y si te da por tocar sus hojas, prepárate para un festín de suavidad, porque su tacto es aterciopelado y es imposible resistirse a acariciarlas todo el día. Lo mejor es que florece durante todo el año, siempre que le des los cuidados adecuados. Eso sí, ojo con la luz: ¡nada de rayos directos! Y recuerda, un riego moderado es la clave, porque el exceso de agua puede hacer que sus raíces se sientan un poco ahogadas.
Cuidados
- Luz: Luz filtrada, ideal en una ventana con cortinas transparentes.
- Riego: Riega cuando la tierra esté completamente seca. Evita el exceso de agua.
- Sustrato: Utiliza macetas sin agujero de drenaje para regar por absorción, lo que previene el exceso de agua en las raíces.
Ciclamen
Características
El ciclamen es una auténtica maravilla. Esta planta bulbosa se presenta con flores que van del blanco al rosa y rojo, creando un espectáculo visual. Florece en invierno. Sus hojas, muy llamativas en forma de corazón, le dan un toque romántico. Para que se sienta como en casa, le encanta estar en lugares frescos y bien iluminados, pero no le des el sol directo. Si la cuidas bien, florecerá cada año. Su mantenimiento es pan comido, y su belleza lo convierte en un favorito para jardines y hogares. ¡El ciclamen es el mejor aliado para darle vida a tu espacio!
Cuidados
- Luz: Prefiere lugares frescos y bien iluminados sin calefacción.
- Riego: Riego moderado y espaciado. En verano, entra en reposo, por lo que se debe reducir el riego.
- Mantenimiento: Colocar en lugares frescos durante el verano para prolongar su vida.
Falsa violeta
Características
La falsa violeta, o como le gusta que la llamen, Episcia, es la reina del color en las plantas de interior. Con su exuberante follaje y flores vibrantes, es perfecta para quienes quieren darle un toque alegre a su hogar. Sus hojas ovaladas, con un veteado que parece una obra de arte, son un deleite visual. Y cuando se trata de flores, ¡esta planta no escatima! Puedes esperar ver tonos rojos, naranjas y amarillos florecer durante todo el año, pero se lucen especialmente en primavera y verano. A Episcia le encanta el calor y la luz filtrada, así que no la expongas al sol directo. Y recuerda, un riego moderado es su mantra, nada de encharcamientos, por favor. Si la cuidas bien, te recompensará con su espectacular colorido.
Cuidados
- Luz: Mucha luz filtrada y puede tolerar lugares sombreados.
- Riego: Riega cuando la tierra esté seca. Es sensible a la deshidratación.
- Propagación: Fácilmente propagable mediante esquejes.
Codonanthe Devosiana
Características
La Codonanthe devosiana, más conocida como la «planta de las flores eternas,» siempre está lista para brillar. Con su impresionante y abundante floración en tonos púrpura y rosa que son un verdadero derroche de simpatía, no hay duda de que captará la atención de todos. Sus hojas, suaves y brillantes, le dan un toque de elegancia que la hace lucir increíble tanto en interiores como en jardines. Esta planta se siente como en casa en ambientes cálidos y húmedos, así que si tienes luz indirecta brillante, ¡estás de suerte! Además, es de bajo mantenimiento y duradera, lo que la convierte en la compañera perfecta para los amantes de las plantas que no quieren complicarse la vida.
Cuidados
- Luz: Mucha luz, pero sin sol directo.
- Riego: Moderado, solo cuando la tierra esté completamente seca.
- Sustrato: Utiliza tierra que permita un buen drenaje para evitar que las hojas se marchiten.
Begonia
La begonia es el diva del mundo vegetal: ¡una verdadera estrella de la diversidad y la belleza! Con una gama de hojas decorativas que lucen formas y colores únicos, y flores que van desde suaves pasteles hasta tonos vibrantes, es difícil no enamorarse de ella. Pero ojo, estas preciosuras requieren un poco de atención especial: les encanta la luz indirecta y un suelo bien drenado, así que asegúrate de darles el trato que merecen. Crecen felices en la sombra, por lo que son muy apreciadas por los profesionales de la decoración de interiores y exteriores.
Cuidados
- Luz: Sombra y mucha iluminación.
- Riego: Riega cuando la tierra esté seca. En verano, cada cinco días; en invierno, cada dos semanas.
- Mantenimiento: Abonar con humus de lombriz y evitar el sol directo.
Bugambilia
Características
La bugambilia, o como le gusta que la llamen, Bougainvillea, es la reina de las plantas trepadoras. Originaria de América del Sur, esta belleza está siempre lista para deslumbrar con su floración vibrante y exuberante. Pero ojito porque esas brillantes brácteas que ves en tonos que van desde el magenta hasta el blanco no son realmente flores, son las que se visten de gala para rodear las pequeñas flores blancas. Esta planta es un verdadero camaleón del jardín: se adapta a diferentes climas y prospera en regiones cálidas y soleadas.
Son muy apreciadas para adornar pérgolas, muros o jardines, porque la bugambilia añade un toque exótico que hará que todos giren la cabeza. Además, es muy fácil de cuidar, aunque un poco de poda regular es necesaria para que no se descontrole. Con el riego adecuado y mucho sol, vas a tener flores todo el año.
Cuidados
- Luz: Necesita varias horas de sol directo.
- Riego: Moderado. Prefiere climas cálidos y debe protegerse en climas fríos.
- Mantenimiento: Podar regularmente para controlar su tamaño.
Rosa del desierto
Características
La rosa del desierto, o Adenium obesum para los amigos botánicos, es la estrella de las suculentas que se roba todas las miradas. Originaria de las áridas tierras de África y Arabia, esta planta es famosa por sus flores que van del rosa pálido al rojo intenso, ¡una explosión de color que ilumina cualquier rincón! Su tronco engrosado es su as bajo la manga, pues le permite almacenar agua durante las sequías, como una verdadera maestra de la supervivencia.
Con su aspecto exótico y su resistencia, se ha convertido en la favorita de jardineros y coleccionistas por igual. Pero no te confíes, porque aunque es resistente, tiene sus caprichos: necesita suelos bien drenados y mucho sol para lucirse en todo su esplendor. ¡Y no te olvides de regarla con moderación! Es perfecta para cultivar en macetas, dándole un toque tropical a patios y terrazas.
Cuidados
- Sol directo todo el día.
- Riego: Espaciado, especialmente en invierno.
- Propagación: Por esqueje o semilla, siendo la semilla más efectiva.
Corona de Cristo
Características
La corona de Cristo, o Euphorbia milii si prefieres el nombre científico, es como la superhéroe de las plantas suculentas. Originaria de Madagascar, esta maravilla se destaca por su resistencia y su increíble floración que roba el aliento. Sus tallos espinosos y hojas brillantes son el complemento perfecto para sus coloridas inflorescencias, que brillan en tonos que van del rojo intenso al amarillo y el rosa. El nombre viene de una leyenda que dice que las espinas representan la corona de espinas que llevó Cristo, ¡un simbolismo que le añade un toque místico!
Lo mejor de todo es que la corona de Cristo no es nada exigente. Se adapta como un campeón a climas cálidos y soleados, solo necesita un riego moderado y un sustrato bien drenado para prosperar. Además, puede sobrevivir en condiciones de sequía, lo que la convierte en una opción popular tanto para jardines como para interiores. Pero, ¡ojo! Su savia puede ser irritante si la tocas sin guantes, así que es mejor tener precaución. Con su belleza y significado, la corona de Cristo es una elección fascinante para cualquier amante de las plantas que quiera añadir un poco de carácter a su colección.
Cuidados
- Luz: Mucha luz y sol directo.
- Riego: Moderado, con un buen drenaje en la tierra.
- Mantenimiento: Abonar y podar para mantener su floración constante.
Laurel
Características
El laurel, o Laurus nobilis si te gusta lo científico, es un árbol o arbusto perenne que se siente como en casa en la región mediterránea. Con su follaje verde intenso y hojas ovaladas y brillantes, no solo es un festín para los ojos, sino que también añade un toque de frescura a jardines y espacios interiores. Pero el laurel no es solo una cara bonita; sus hojas aromáticas son la estrella de la cocina mediterránea, aportando sabor a un montón de platillos.
Esta planta tiene una historia rica que está llena de mitología y cultura. En la antigua Grecia y Roma, el laurel era el símbolo de la victoria y el honor. De hecho, los ganadores de los Juegos Olímpicos se coronaban con guirnaldas de laurel, ganándose así el título de «laurel de la victoria». Y no solo eso, ¡también se le ha dado un lugar en la medicina tradicional por sus propiedades antiinflamatorias y digestivas!
Cuidar el laurel es pan comido: solo necesita un suelo bien drenado y luz solar directa para estar feliz. Puedes cultivarlo en macetas o en el jardín, y sus hojas se pueden usar frescas o secas en la cocina. Con su fascinante historia, sus múltiples usos y su belleza, el laurel es una planta que realmente brilla tanto en la gastronomía como en la jardinería.
Cuidados
- Luz: Mucha luz y sol directo.
- Riego: Regular, cada cinco días.
- Mantenimiento: Retirar semillas y podar para evitar el estrés de la planta.